Jamón loncheado: cuándo comprarlo y cuándo no

Seguro que al comprar jamón ibérico una de las dudas que te ha asaltado es: ¿me conviene elegirlo entero o pido el jamón loncheado? Para ayudarte a resolver esta pregunta y saber mejor cuándo esta elección se adapta a tus necesidades, en este post exploramos sus pros, contras y forma de conservación. Desde IberGour, ¡te lo contamos!

Plato de jamón ibérico loncheado
Plato de jamón ibérico loncheado

Ventajas del jamón loncheado

1) Es el formato más práctico para consumir jamón
El jamón loncheado resulta muy versátil, ya que permite desde improvisar cualquier comida hasta convertirse en el obsequio perfecto para llevar a una cena con amigos en lugar, por ejemplo, de la clásica botella de vino.
Además, para mucha gente, la compra de un jamón ibérico entero puede parecer demasiado: ¿podremos consumir tanta cantidad sin que se ponga malo? Sin embargo, si lo reciben en lonchas y envasado al vacío en varios lotes, se puede comer poco a poco durante medio año sin miedo a que se eche a perder.
2) Ahorra mucho espacio
El jamón loncheado evita tener un soporte jamonero en la encimera de la cocina durante meses: basta con repartir bien los sobres en la nevera, ¡apenas ocupan sitio y caben en cualquier lado! No tendrás que montar el soporte, hacerte con los cuchillos necesarios para un buen corte, mantenerlos en perfecto estado o estar atento a la evolución del jamón ibérico.
3) ¡Es perfecto para transportar!
El jamón en lonchas y envasado al vacío puede llevarse en el equipaje de las vacaciones, de excursión o a un picnic. Además, al ir en este formato, aguanta bien los desplazamientos simplemente con tener un mínimo cuidado: evitar la luz y los cambios bruscos de temperatura. Por último, en esta misma línea, el jamón loncheado puede acompañar a los más jóvenes que viven fuera y así disfrutar de un buen ibérico como en casa.
Jamón ibérico loncheado todo
Jamón ibérico loncheado todo

Desventajas de comprar jamón ibérico loncheado

1) Una vez abierto el sobre, las lonchas se secan muy rápido
Por este motivo, lo ideal es envasar en lotes de entre 80 y 100 gramos, la forma en que lo hacemos en IberGour. Así, cada vez que se abre un sobre es para consumirlo entero y, si se queda corto, ¡se abre otro!
2) Se pierde cierta magia
Para mucha gente, tomar el té o disfrutar de unas ostras tiene su ritual. Lo mismo ocurre en el caso de cortar el jamón, que se convierte en un momento especial previo a la degustación de un auténtico jamón ibérico de bellota.
3) No controlas el corte
En la misma línea que el punto anterior, al recibir el jamón loncheado no puedes elegir el grosor según los gustos de cada uno, pero tampoco la cantidad de grasa o el tamaño de las lonchas.

Jamón ibérico en IberGour

Piezas enteras (con hueso), deshuesadas y en lonchas

Pata negra
-5%
Jamón Cerdos Extremeños Bellota
Bellota 100% Ibérico
68,20 €/kg

Jamón Cerdos Extremeños Bellota

4,8(93)
Stock: 7 jamones.
426,25 €jamones de 6,25 a 8,5 kg
Pata negra
-5%
Paletilla Cerdos Extremeños Bellota
Bellota 100% Ibérica
46,22 €/kg

Paletilla Cerdos Extremeños Bellota

4,6(101)
Stock: 4 paletillas.
196,45 €paletillas de 4,25 a 5,5 kg
Jamón GM e Hijos
Jamón
57,40 €/kg

Jamón GM e Hijos

4,7(32)
Stock: 1 jamón.
459,18 €jamones de 8 a 8,5 kg

¿Cómo conservar el jamón loncheado?

Los sobres de jamón loncheado envasados al vacío se pueden guardar en la nevera y aguantarán en perfecto estado hasta 6 meses. Lo ideal es evitar que les afecte la luz, motivo por el cual desde IberGour enviamos los sobres en una caja que puede introducirse directamente en la nevera.

Como decíamos, nuestros sobres son de 100 gramos, por lo que lo habitual es consumirlos en poco tiempo. Si sobran lonchas, lo más recomendable es envolverlas con un poco de papel film, meterlas en un tupper y guardar en la nevera. Así, evitaremos que se seque el jamón ibérico y también la contaminación de posibles olores de otros productos conservados.

Si tenemos muy claro que no se van a consumir las lonchas sobrantes en una larga temporada y contamos con una máquina de vacío, podemos volver a envasarlas.

El jamón loncheado también puede congelarse, aunque no es lo más habitual, ya que el margen para el consumo es muy amplio. En este caso, debe tenerse en cuenta que se oscurecerá un poco, pero no se perderán matices si todo el proceso se realiza correctamente.

Si se trata de lonchas sueltas, las guardaremos con film y tupper; si no, directamente en el sobre al vacío. El descongelado será paso a paso: primero el jamón irá a la nevera para ir ganando grados y, después, lo dejaremos a temperatura ambiente.

En todos los casos, los sobres o las lonchas que han sobrado deben respirar unos minutos antes de su consumo. El jamón ibérico necesita un tiempo para recuperar los aromas y alcanzar el punto óptimo para su consumo.

¿Cómo recibirás el jamón ibérico loncheado al vacío de IberGour?

Si decides comprar jamón loncheado en IberGour, lo recibirás en las mejores condiciones para disfrutar este producto único. Cada sobre al vacío lleva 100 gramos de jamón, con las capas de lonchas separadas por láminas de plástico para extraerlas y servirlas fácilmente.

Sobre de 100 g de jamón cortado a cuchillo
Sobre de 100 g de jamón cortado a cuchillo

Estos sobres llegan en una caja que se puede guardar directamente en la nevera, pero también puedes repartirlos sin dificultad y aprovechar al máximo el espacio con el que cuentes. Una vez allí, dispones de 6 meses para consumirlo.

Al comprar el jamón ibérico que hayas elegido, podrás seleccionar si quieres corte a máquina o a cuchillo. La primera es la opción por defecto y la más económica, mientras que la segunda tiene un coste mayor. Además, recibirás en casa también los huesos del jamón o la paleta ibérica para aprovecharlos en tus caldos y guisos.

Con toda esta información, seguro que ya sabes si el jamón loncheado se adapta a tus gustos y necesidades. Pero, si tienes cualquier duda, ponte en contacto con nosotros y te ayudaremos cuanto antes.